La vida nos lleva por insólitos senderos, un día podemos estar en lo alto, rodeados de gloria, fama, riquezas, y al otro día podemos caer en lo mas profundo, un abismo lleno de miseria, desamor, abandono, soledad, enfermedades. Países cuyos ciudadanos gozaban de una vida holgada, un sistema de salud asequible a todos, con una economía floreciente , donde la gente vivía feliz disfrutando de todas las conquistas logradas con el tiempo, han caído en una gran crisis social, económica y política. La vida puede cambiar en un instante por diferentes motivos y algunos seres humanos por diferentes causas han llegado a degradarse tanto que cometen actos de seres irracionales.Todos sabemos eso, pero no le damos mucha importancia porque nuestra puerta aun no ha sido tocada por la adversidad y creemos que estamos a salvo de estas calamidades.
La unión de estos factores e incluso cada uno por separado en la sociedad despiertan, y digo despiertan porque creo que siempre han estado ahí, dormidos, dispuestos a brotar ante cualquier evento, todo tipo de fobias y prejuicios, incluyendo en ellos el rechazo al segmento mas marginado de la sociedad: los desamparados.Los desamparados viven una vida traumática, no tienen la protección de un techo ni de una comunidad, son personas marginadas, aisladas y estigmatizadas.
Millones de personas alrededor del mundo carecen de un techo, muchos usan refugios para pasar la noche, otros se guarecen debajo de puentes, en parques, calles, entradas de edificios, estaciones de trenes, donde quiera que haya un sitio para descansar, estas personas son de todos los orígenes, razas y credos, solteros, casados, matrimonios con hijos, mujeres que han sido víctimas de violencia domestica y violaciones, hombres , ancianos y jóvenes, los encontramos en grandes ciudades y en zonas rurales, y muchos de ellos sin saber en que momento perdieron trabajos, casas, familias, amigos…….Ellos no han elegido la desdicha, la perdida del trabajo o de la casa por no poder pagarla son algunas de las causas que los han llevado a ese estado.
En muchos de los casos de violencia donde hay involucrado al menos un desamparado, el es la víctima, muchos han muerto a golpes mientras duermen, hay muchos que padecen de enfermedades mentales u otras dolencias que los llevan a las drogas para aliviar el dolor y sin recibir asistencia medica adecuada no lo pueden superar.
Ronald Eduard Poppo no nació desamparado, estudio en escuelas de renombre y tenia muchas expectativas para su vida, un día sin poder explicarnos por que o como termino debajo de un puente , sin rumbo. Este hombre de 65 años, desamparado, fue víctima de un hombre que tenia techo, que drogado y convertido en una bestia lo ataco hasta dejarlo sin rostro, podrá después de varias intervenciones tener otro rostro , pero retomar su vida, recuperar los anos perdidos lejos de su familia sin una ayuda sera bien difícil. Poppo es un numero, una estadística porque cada día son mas los que se suman a esa larga lista de desamparados, es otro caso de violencia que se suma a otros muchos acaecidos en nuestras calles.
Muchos desamparados no aceptan ayuda , se van de los albergues, no permiten que se les acerquen los trabajadores sociales , mendigan para pagar las drogas y el alcohol, algunos creen que todos los desamparados son drogadictos ,vagabundos, ladrones, eso es un mito, he tenido la experiencia de trabajar como voluntaria en un albergue para desamparados , he conversado con ellos y he entendido que las ideas y comentarios sobre el por que quedan desamparados están fundamentadas sobre rumores o percepciones erróneas.La sociedad “castiga” a la gente por el solo motivo de no tener un hogar, una adversidad de la que no son culpables e incluso se han llevado a realizar batidas contra ellos como ocurrió contra los niños de la Calle. Los prejuicios nos limitan a tenderles una mano, brindarles una oportunidad para que puedan salir de las calles y esto unido a la carencia de recursos hace que su reincorporación a la sociedad sea casi imposible.